Error significa ejecutar una acción de manera incorrecta. No haber realizado los movimientos oportunos, no haber fijado la tecla correspondiente; con lo que en vez de acceder a lo deseado se produce un bloqueo.
¿ Qué pasa en la cotidianeidad cuando estallan conflictos de todo tipo ? Que las palabras o acciones no han sido las idóneas, y en vez de resolver o conseguir lo pretendido, se produce un paro donde deberá insistirse nuevamente para deshacer la polémica.
Cuando todo se hace bien no se ha de enmendar nada, pero la más mínima pifia obliga a retroceder y corregir. En ocasiones se requerirá poco tiempo, y en otros bastante. La cuestión es : ¿ por qué se cometen errores ? Por falta de conocimiento, por falta de atención, por negligencia, por una ambición desmesurada; en definitiva por un desajuste entre sujeto y objeto.
Todas las problemáticas personales y colectivas es por no pensar, sentir o actuar de acuerdo a lo que requiere cada situación para establecer una armonia. ¿ Y como sabremos cual es la manera apropiada ? Antes de movilizar los deseos en hechos, observar en perspectiva las posibles consecuencias, ver pros y contras, la incidencia en nosotros y en el entorno, y con las experiencias previas y resultados, decidir la estrategia para implantar lo benéfico o al menos no perjudicial.
¿ Cuantas personas piensan en el daño que pueden causar las palabras o las acciones ? ¿ Cuantas personas antes de hacer o decir tienen en cuenta el trato digno hacia quien pueda incidir ? ¿ Cuantas personas muestran respeto por la naturaleza, los animales, por los humanos, por los objetos ?
Hay conflictos constantes por que los creadores de los mismos no saben comportarse, no saben tratar con respeto, con educación, con consideración, y cuando en vez de civismo prevalece la barbarie, sólo puede surgir tensión, problemas y trabas.
Ir repitiendo las mismas posturas por un intelecto que no discierne con claridad, por unos sentimientos contraproducentes y por unas acciones necias, es permanecer atrapado en el error por una ineptitud global. Y esto se refleja a diario, en lo personal, en las relaciones, en la incapacidad de ampliar la conciencia para substituir patrones caducos perjudiciales por aquellos que liberen de sufrimientos.
Romper el círculo vicioso exige subir el nivel evolutivo para pasar de los constantes atascos a la fluidez.