Todos queremos ver de acuerdo a nuestros deseos y a lo considerado importante o valioso. Saber observar, percatarse de lo que hay alrededor, requiere identificación. Lo que vemos en el entorno es lo que nos impulsa en nuestra conducta. Los mensajes que recibimos pueden venir de diferentes maneras. Advertencias sutiles o evidentes indicandonos inconvenientes si hacemos según qué. Empujados por deseos egoistas y acciones perjudiciales, a pesar de saberlo en mayor o menor medida, derivará en unas consecuencias peores que la posible ganancia o satisfacción que ha empujado a ejecutar lo realizado anteriormente. Hemos de despertar dentro la fuerza espiritual de percibir la diferencia entre lo bueno y lo negativo y la elección correcta. Distinguir lo que empuja hacia arriba o hacia abajo, lo que hace emerger las buenas maneras o bien la crispación de las malas maneras en la búsqueda de pretensiones discordantes. La civilización se mantiene en el caos por que prevalece la visión reducida impulsada por intereses personales sin ver su impacto a gran escala. La interacción entre lo individual y lo colectivo es constante y interdependiente, y si los planteamientos y la actitud es marcadamente individualista, es por el hecho que en lo esencial en nuestra continuidad vital, depende exclusivamente de nosotros. Oscuridad es ignorancia, luz es conocimiento. A más visión más posibilidades de proceder acertadamente. A mayor oscuridad más posibilidades de equivocarse. Antes de actuar hemos de tener el libre albedrío para decidir como dar salida a ciertas ideas o objetivos. Una vez en marcha, incidiendo en el medio y en otras personas, el desenlace depende de factores diversos no controlables. ¿ Vemos objetivamente respecto a nosotros o la visión hacia los demás ? ¿ Sabemos ver con perspectiva y ecuanimidad ? ¿ Nos enfocamos sólo en lo que nos interesa ? ¿ Obviamos lo que desagrada y hacemos ver que no existe ? Todos los problemas del no acoplamiento entre la parte emisora y la parte receptora, que en las relaciones ejercemos las dos funciones. Esto indica que hemos de saber qué queremos, por qué y cual es la forma idónea para conseguirlo pensando en la corrección final en el resultado. ¿ Aquello que queremos ver o querríamos ver tiene una connotación benigna o maligna ? ¿ Generará bienestar o malestar ? ¿ Para el beneficio de una parte perjudicando a otra ? La visión oscurecida proviene de objetivos erróneos empujados por deseos del ego que solo ve lo que quiere ver. Ver con claridad es una muestra de mayor civilización al ubicar las partes y el conjunto persiguiendo lo que es justo, no movido por intereses personales. Ganancias a corto plazo y pérdidas a la larga, o bien prudencia y rectitud para obtener lo apropiado de acuerdo al mérito efectuado. Todo dependerá de la visión y de la actitud adoptada.
Este blog no pretende emular a los grandes pensadores clásicos, sino sólo unas breves exposiciones que puedan llegar a todo tipo de personas.
lunes, 27 de mayo de 2024
VER OBJETIVAMENTE O LO QUE QUIERO VER
viernes, 10 de mayo de 2024
CRÍTICA ESTÉRIL O CRÍTICA RESOLUTIVA
¿ Cual es la finalidad de la crítica ? Mejorar lo existente. Antes de enumerar lo que creemos incorrecto, hemos de estar seguros de que a quien dirigimos la crítica será receptivo y querrá modificar expresiones si es oportuno. Los fundamentos de la crítica requieren la confluencia de tres puntos. Ha de ser buena en su finalidad. Ha de ser útil, o sea aplicativa. Y ha de ser necesaria, para el beneficio del aludido y la incidencia en terceros. Lo que impulsa a criticar es la percepción acertada o no del observador, que no se está actuando como debería de acuerdo a lo considerado correcto ¿. El crítico en cuestión tiene a su abasto el cuadro completo para juzgar con ecuanimidad ? ¿ Son valoraciones de acuerdo a sus gustos y intereses ? ¿ La crítica es pensando en el o en el criticado ? ¿ Qué está mal ? ¿ Se puede demostrar que realmente es así ? ¿ Qué no gusta ? ¿ La crítica afirma con argumentos constatables o es una opinión ? La afirmación ha de aportar pruebas para ser creíble y cumplir la función de enmienda. Si es una opción de acuerdo a unas ideas y valores particulares, es subjetiva, y si el fondo no es mejorable, no ejerce el objetivo que es pulir a lo que se hace referencia. El crítico muestra descontento por lo que querría realmente y no pasa. El discurso se ha de reformular para conseguir el verdadero propósito reflexivo que es resolver lo estropeado o ciertas conductas. La critica quiere retocar, corregir, optimizar, es natural por que buscamos la perfección. No obstante, si no influye ni modifica lo pretendido no sirve y es estéril. El crítico ha de dar ejemplo. Las exigencias hacia otros debe cumplirlas el primero. Para ser escuchado y creíble se debe dar ejemplo. La crítica siempre se ha de fomentar en la positividad posterior después de observar y reflexionar que facilite un cambio favorable a continuación. Todo lo que no vaya en esta dirección será inútil. Ver lo negativo es muy fácil, sobretodo en una sociedad a la búsqueda de comodidad, del mínimo esfuerzo y poca responsabilidad, y si además añadimos el egoismo con los planteamientos y actitudes desencadenantes que vendrán, el porcentaje de error en el comportamiento es altamente elevado. Apuntamos al malo, vemos al malo, mostramos al malo. ¿ Quien se expresa así puede demostrar que es impecable ? Insistir constantemente en la oscuridad es justamente por la incapacidad de introducir más luz en nosotros. El sol siempre brilla y está presente, si no lo vemos es por que con nuestra negatividad hemos ido añadiendo cortinas que nos impiden verlo.