viernes, 29 de noviembre de 2019

CARACTERÍSTICAS DEL INTOLERANTE

El intolerante es autoritario, quiere imponer su criterio rechazando peculiaridades de otros que le molestan. El intolerante eleva sus ideales, su identidad de forma desmesurada a causa de tener un ego hinchado que le hace creer que es importante, y en consecuencia todo lo que se auto eleva a si mismo disminuye el valor del contrario en igual proporción.
El intolerante no puede vivir en paz porque siempre está pendiente de lo que dicen o hacen quienes son opuestos para censurar, prohibir o apoyarse en leyes que limiten, condicionen o hagan desaparecer lo que no gusta.
El intolerante es un amargado que amarga a los demás con sus constantes pretensiones de dominio y de imposición. Solo ha de prevalecer su posición, sus maneras, y lo que salga de este guión es atacado y perseguido.
El intolerante con su microcosmos y su delirio de grandeza, tiene una mente cerrada que no acepta diferencias ni discrepancias. Va en contra de la propia evolución que es expandir conocimientos y conciencia, y el inmovilismo lo petrifica impidiendo avanzar, donde el estancamiento acumula impurezas que tarde o temprano comportarán negatividad.
El intolerante se cree poseedor de la verdad, cuando su estrechez y comportamiento señalan justamente lo contrario.
Quien está pendiente contínuamente de otros que no puede soportar, se equivoca en la finalidad y en el comportamiento. No estamos aquí para generar discordia y enfrentamientos, sino justo al revés, encontrar la via idónea para que prevalga la concordia y la cooperación.
Los que utilizan malas maneras han de aprender de los considerados adversarios dialogantes, pacíficos y abiertos a soluciones racionales, coherentes y justas.

sábado, 16 de noviembre de 2019

INTOLERANCIA

¿ Qué es tolerable ? ¿ Qué es intolerable ? Sin duda no se puede ser objetivo cuando se ha de entrar a valorar factores diversos que dependen de unos criterios ideológicos, culturales, de unos deseos, de unas convicciones, etc. Lo que es normal para unos es detestable para otros, y al revés igual. ¿ Quien está en posesión de la verdad ? El que sea ecuánime, respetuoso, considerado, que trate con dignidad quien es diferente.
Lo que ha de ser intolerante son todas aquellas acciones que generan daño personal, en lo físico o en bienes urbanos. Ahora bien, catalogar de intolerable unas palabras determinadas, unas canciones, unos colores, unas banderas, ciertas pretensiones, es propio de dictadores.
El intolerante es aquel que no puede soportar nada que no sea de su agrado que sea diametralmente opuesto a sus gustos. Eso si, lo que hace referencia a su identidad, a sus características, es intocable y no puede ser puesto en duda ; viene a ser como estar poseidos de una gracia divina que les indica que está bien y que no, que es bueno y que es malo, que es aceptable y que es inaceptable.
Los intolerantes son extra super sensibles con sus peculiaridades distintivas, y en la misma proporción dureza extrema para los que no se ajustan a sus cánones.
Sensibleria enfermiza versus insensibilidad máxima.
Cuando la libertad de expresión se ve amenazada, el problema no es lo que se dice, el problema lo tiene quien quiere tapar bocas, quien te quiere encerrar en una habitación para que no molestes, que quiere prohibir todo lo que le venga en gana si no es de su agrado. Y movidos por una emocionalidad visceral irreflexiva, no se percatan que a más opresión más insistencia y más anhelo de libertad de los que son contrarios. Incapaces de ver con claridad y en perspectiva, cada paso conduciente a imponerse por la fuerza se le va girando en contra, porque esta actitud va en contra de establecer vínculos armónicos. Y todo es cuestión de tiempo para que las formas chapuceras incrementen el caos que fuerce a cambiar las imposiciones, porque seguir de la misma manera solo alarga dilemas que solo pueden resolverse con una actitud y disposición civilizada.